Roy Brown, cómodo en la piel de un hombre de 70 años

Roy Brown, cómodo en la piel de un hombre de 70 años“Hay que seguir cantando, porque con la música liberamos la emoción. Hay que seguir confrontando lo injusto del sistema porque en el cuestionamiento podemos darnos de frente con lo positivo, que es, estar vivo. Hay que seguir comunicando, hurgando en el pasado y descubriendo lo heroico de nuestra historia, y contarlo. Tengo suerte de ser músico en este país que resiste. Y este es el país que Fabi y Emil se merecen”.

Así de optimista y combativo se muestra el cantante y compositor Roy Brown al cumplir 70 años, los que se propone celebrar junto a sus hijos de 15 y 10 años como invitados especiales de la producción, Al son de los 70.

La fiesta es en el Teatro Yagüez el 30 de octubre de 2015 a las 8 p.m.

Para largo el Mr. con macana

Aunque reconoce que la música podría modernizarse, por lo demás, Roy está convencido de que las canciones que escribió en los años 70 para confrontar el sistema colonial, el abuso policiaco y la lucha por la independencia no tienen fecha de caducidad mientras se siga oprimiendo al pueblo.

“Creo que en general mis canciones de los setenta, los textos, están vigentes, en lo que observan y comentan. Quizá hay que poner la música al día. La manera de producir música ha progresado. La realidad avanza y hay otros entendidos en cuanto a política se refiere. La opción soberanista, por ejemplo, plantea otras estrategias para la liberación nacional. Pero la verdad absoluta en Puerto Rico es que el uso legal de la violencia es prerrogativa del Estado que la va a usar tan pronto nuevas fuerzas sociales asomen la cabeza. Tenemos Mr. con macana para largo”, afirma Brown quien alude a uno de sus mayores éxitos musicales de los años 70, cuando la Universidad de Puerto Rico era el eje de la lucha por los derechos humanos y los estudiantes eran las víctimas del sistema policial abusador y represivo.

Es contundente al hablar de lo que ha sumido al país en una de sus peores crisis económicas y que a su juicio, pone en juego nuestra vida colectiva. “Los corruptos se han chupado el mangó y ya no queda jugo. Están desesperados y no les queda otra que exprimir al pueblo. Y todo lo que hacía la vida aquí tolerable peligra”.

Roy Brown, cómodo en la piel de un hombre de 70 años“Decir la verdad siempre vale la pena. De otra manera no se puede vivir. En Puerto Rico, en el planeta, siempre ha predominado el dominio de unos pocos. En el colonialismo y el capitalismo prevalece la crueldad de arriba para abajo y prevalece también el machismo, el abuso a menores, el abuso al que trabaja, la manipulación de los medios de comunicación”, sentenció.

Sin brecha generacional

Tan actual es el discurso de sus canciones, que el compositor cuenta algunas anécdotas para demostrar que su trabajo trasciende las brechas generacionales. “A veces se me acercan jóvenes que me expresan emocionados que es la primera vez que me escuchan en persona y que asumen mi propuesta. Otros se acercan a decirme que me escuchan desde su infancia, gracias a sus padres. Me recuerdan mi vida con Yarí y Lara, mis dos hijas con Patria Vicente, que sentían orgullo de que sus amigos fueran fanáticos de mi música. Me da alegría que lo mismo sucede ahora con los amigos de Fabiola y Emil”, Roy habla de sus hijos menores nacidos de su relación con la ex tenista Emilie Viqueira, su esposa. Ambos actuarán junto a él en el Yagüez.

“Puerto Rico tiene alma, inspira, y pienso que no queda otra que sobrevivir. No podemos dejar que la mediocridad nos detenga”, añadió.

Con sus hijos en escena

Emil es un veterano, comenzó a tocar batería a los 5 años. A los 10 aceptó la invitación de su padre para acompañarle en el concierto y tocar junto a él la emblemática Boricua en la Luna, un poema de Juan Antonio Corretjer que Brown musicalizó y convirtió en himno nacional.

“Estar con Emil en tarima fue una hermosura. Escuchar la reacción positiva del público fue esperanzador”, comentó Roy a mayaguezsabeamango.com. “Emilie y yo hablamos y se lo propusimos. No fue fácil vencer los nervios, para los tres”, puntualizó al hablar de la primera edición del concierto en agosto pasado.

Fabiola, su hija de 15 años hará otra cosa. “Escribí una canción titulada Abrió los ojos, la canta Desiré Morales junto a Tato Santiago en el piano. Fabi baila. Élla nos hechiza en tarima”, dice orgulloso. “Baila desde siempre, pero en serio con el Western Ballet de las hermanas Nana y Mumi Badrena”, acotó. Para el evento del Yagüez Nana ha coreografiado la pieza. “Va a ser un gozo”, insiste.

Al son de los 70

El sugestivo título del concierto alude a su edad y al origen de su carrera musical. “Son setenta años cumplidos. Mi obra prima, que ha pervivido, se da en la década del setenta. Es un cuento de los setenta”, dice.

Al convite ha invitado a los amigos de siempre, Zoraida y Tato Santiago y a Tito Auger. Como no podía ser de otra manera el mismo es un repaso de su carrera. “Parcialmente un repaso de un momento importante de mi vida, que fue la gesta de Aires Bucaneros. Pero lo positivo es que Zoraida siempre ha estado presente en mi vida de artista. Élla, su hermano Tato y su compa Quique han sido siempre un sostén. Es una relación importante y definitoria”.

Se siente cómodo en la piel de un hombre de 70 años. “Domino con serenidad lo que propongo como cantante y compositor y tengo una relación sincera con mis amigos músicos que me respaldan hace años, como Toni Asencio, Manny Ojeda, Benito Carrillo, José Flores, y claro, Tato Santiago”.

Al son de los 70, está auspiciado por el Municipio Autónomo de Mayagüez y la entrada al Teatro Yagüez el 30 de octubre es libre de costo.

“Un nuevo encuentro con el futuro. Que suerte ser puertorriqueño”, concluyó Brown.