Una fiesta de pueblo para despedir a un gigante de la comedia
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- por mayaguezsabeamango.com
La legendaria Orquesta Happy Hills hará un tributo musical para despedir a uno de sus integrantes más célebres, el mayagüezano Ysrael “Shorty” Castro. El músico se inició como cantante en la famosa orquesta hace más de medio siglo.
El polifacético artista mayagüezano será sepultado en el Viejo Cementerio Municipal de su ciudad natal, el día en que habría cumplido 90 años. Castro nació el 28 de enero de 1928.
La Administración Municipal de Mayagüez ha preparado un velorio de pueblo en el Palacio de Recreación y Deportes para despedir “con todos los honores al Gigante de la Comedia, Israel “Shorty” Castro”, según un comunicado emitido desde la oficina de prensa municipal.
Para ello se ha convocado a “una fiesta multitudinaria” como lo solicitó el actor antes de su deceso el pasado lunes 22 de enero 2018. “Shorty” murió en Orlando, Florida por complicaciones del cáncer que padecía. También tuvo complicaciones cardiacas. La falta de energía eléctrica en su residencia de Bayamón, tras el paso del huracán María, precipitó su mudanza a los Estados Unidos donde murió.
El alcalde José Guillermo Rodríguez ha dado instrucciones para que se abran las puertas del Palacio de Recreación y Deportes desde temprano, “para que el público de esta Ciudad y de todo Puerto Rico, le rinda los honores y respetos al polifacético comediante”.
El itinerario
El sábado 27 de enero, el coche fúnebre sale de la Funeraria Fernández de Mayagüez rumbo al Palacio de Recreación Germán Wilkins Vélez Ramírez a las 8:00 am. A las 4:00 pm se celebran las honras fúnebres encabezadas por el alcalde Rodríguez, miembros de la clase artística y familiares, luego de lo cual la Orquesta Happy Hills hará su presentación en honor al también conguero. A lo largo del “velorio de pueblo” distintas orquestas y grupos musicales le rendirán tributo a “Shorty”. El féretro estará expuesto hasta las 10:00 pm.
El domingo la comitiva fúnebre saldrá del Palacio a la 1:00 pm y hará un recorrido por el Colegio de Mayagüez y la calle Méndez Vigo hasta llegar al Litoral que lleva su nombre, frente a la imponente bahía de Mayagüez. De allí la comitiva irá hacia la calle Duscombe antes de llegar al histórico cementerio viejo en la calle Betances.
Shorty
Castro, de 89 años, nació el 28 de enero 1928 en el barrio la Quinta, se crió en el barrio París de Mayagüez pero pululaba por el barrio Dulces Labios, desde donde comenzó su carrera artística como conguero y cantante de orquestas de música tropical en los años 1950.
Medía cuatro pies 11 pulgadas. Fue el pelotero de las Ligas Mayores de béisbol profesional, Artie Wilson quien le puso el apodo a “Shorty” tras conocerlo cuando, siendo un jovencito, pintaba la línea blanca del campo de juego del parque de la Liga del Barrio París, donde se jugaba béisbol profesional. “Cuando Artie volvió a Mayagüez preguntó ‘Where is shorty?’ y de ahí en adelante todo el mundo me siguió llamando “Shorty”, contaba el artista.
Aunque se le distingue como comediante, “soy más músico que actor” confesaba. “A los tres años tocaba maracas y cantaba con mi tía Adelita que era ciega y tocaba guitarra”, recordaba. En noveno grado abandonó la escuela y comenzó a trabajar de mensajero en una tintorería antes de iniciarse como músico y actor.
Formó parte de las populares comedias, La criada malcriada junto a Velda González, y Jajá, jijí, jojó con Agrelot. A él le escribió casi todos sus libretos, desde Torito and Company hasta casi el final de su carrera.
Al exitoso programa Esto no tiene nombre se integró en el 1969. Interpretaba varios personajes, escribía y colaboraba junto a Jacobo Morales en la dirección artística. En esa época viajó con frecuencia a Nueva York para presentarse en un espectáculo de variedades junto a Velda González y el cantante Hugo Leonel Vaccaro, en el teatro Boulevard y Puerto Rico del Bronx. Hizo cine y teatro. Trabajó en el WIPR-TV como actor y libretista.
La Happy Hills
“Shorty” Castro figuró como cantante en el primer disco que grabó la Orquesta Happy Hills, en el 1956. En esa producción, una de las trompetas la tocaba Filiberto Ojeda Ríos, quien nunca formó parte de la agrupación a tiempo completo, pero fungió como trompetista sustituto para el disco.
La orquesta sangermeña, fundada en 1929, fue tan famosa que tocaba en las fiestas patronales y bailes de todo Puerto Rico. Grabaron poco. De 1956 al 1987 solo habían grabado una docena de canciones. Su fama era tal que, según los entendidos, no necesitaban estar en la radio para llenar los salones de baile y las plazas, esa teoría le pasaría factura más adelante.
Ahora la orquesta le rinde tributo musical al mayagüezano en su despedida definitiva.