En Mayagüez el pitorro es legal
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- por Mariana Reyes
Hacen más o menos una caja de Pitorro al día. Empezaron comprando una finca para sembrar caña, vendieron guarapo por un tiempo -en cuánto festival criollo pudieron- y así fueron reuniendo el dinero para establecer la única destilería artesanal de Puerto Rico, Destilería Coquí.
El proceso les tomó cuatro años, el mismo tiempo que tardaron en conseguir todos los permisos para poner a funcionar la empresa que elabora el Pitorro. En Puerto Rico es la primera vez que se vende Pitorro de manera legal. Todo el proceso sucede en el barrio mayagüezano de El Maní. “Somos mayagüezanos adoptivos”, dice María Morales quién se mudó para la Sultana con su esposo y socio Héctor Quiñones, un ingeniero mecánico que diseñó los alambiques donde hacen el ron. El Pitorro se consigue de dos sabores, puro o blanco y de frutas. “Lo tendremos también de coco y de piña”, explica Morales sobre el producto que aprendieron a hacer visitando diversos alambiques en los que se fabrica el ron casero típico puertorriqueño.
El pitorro, también conocido como ron caña o cañita, es un ron que se fabrica de manera clandestina en alambiques que no cuentan con permisos gubernamentales. El producto, sin embargo, es muy popular en Puerto Rico. Es común que el pitorro esté presente en las fiestas, particularmente en la época navideña. Una vez está hecho el ron puro se “cura” con las frutas que le dan el sabor. Hay pitorro de todos los sabores imaginables: tamarindo, parcha, guanábana, café, coco y de muchos otros. Los alambiques clandestinos tienen diferentes fórmulas para crear su producto. En el caso de Pitorro la elaboración está regida por los parámetros establecidos por las distintas agencias concernientes: Administración de Reglamentos y Permisos (ARPE) y el Departamento de Salud, entre otros que regulan con parámetros parecidos a las otras dos destilerías del país: Bacardí y Serrallés.
En Pitorro, empresa que tiene cuatro empleados, llevan a cabo el proceso de la manera más tradicional posible y los pedacitos de fruta adentro de la botella así lo evidencian. El ron, que está en el mercado desde 2009, se vende en toda el área oeste y en algunos negocios de San Juan. Venden cantidades reducidas de la bebida –no más de 500 litros semanales- a supermercados, como Econo y en “todas las barras de Boquerón y la mayoría del área oeste”, según explica Morales. No tienen autorización para exportarlo, esto requiere una serie de permisos adicionales que ni siquiera han intentado conseguir. “Ha venido gente a llevarse botellas para distintos lugares desde Alemania hasta Alaska”, dice Morales sobre la clientela, que también puede conseguir el Pitorro en sus instalaciones en la carretera número dos.