Tallar santos ha convertido a una joven artesana “en una mejor persona”

Tallar santos ha convertido a una joven artesana “en una mejor persona” Trece artesanos y artesanas participaron este año en el Certamen de Tallas de la Virgen de la Candelaria que auspicia la administración municipal de Mayagüez hace más de dos décadas.

Un jurado de cinco miembros concedió tres primeros premios en las categorías, primitiva o tradicional, erudita y contemporánea. En la categoría primitiva o tradicional hubo también un segundo y tercer premio. Además, el jurado confirió menciones honoríficas al trabajo de cinco artesanas.

Según la presidenta del jurado Awilda Anguita este año hubo mayor participación que en años anteriores y “nos sorprendió que participó más gente joven”.

“Eso es bueno porque la talla no se está olvidando, está renaciendo y hay jóvenes que están compitiendo en la categoría primitiva o tradicional”, destacó la también gestora cultural y talladora.

Artesanas y artesanos de Aguada, Añasco, Bayamón, Caguas, Guaynabo, Orocovis y San Juan respondieron a la convocatoria del certamen que comenzó en enero de 2002.

La preciosura de la categoría erudita

La calidad de la pieza que ganó en la categoría erudita sorprendió no solo al jurado sino a otros talladores y al público general que admiraba la calidad del trabajo artesanal, los detalles, las terminaciones, la pintura y movimiento logrado en el manto y ropaje de la virgen. La talladora es una joven estudiante de derecho de 27 años con solo tres años en el oficio.

Nicole Marie Santiago Galloza, primera generación de talladores en su familia, se alzó con un premio en metálico de mil dólares.

Tallar santos ha convertido a una joven artesana “en una mejor persona” “Notamos que hay calidad y realmente la calidad es muy buena. Había artesanos con trayectoria, que agradecemos que participen, pero me alegró mucho que hubiera gente joven participando. La ganadora, que representa a la juventud, su trabajo fue exquisito”, insistió.

Anguita, promotora de la creación del certamen y ex gerente del Departamento de Arte y Cultura de Mayagüez explicó, que si bien es cierto que la categoría erudita y contemporánea nos acerca a una manera de tallar más parecida “a las tallas de mármol y cerámica que tienen más perfección en la talla”, el jurado valora la talla primitiva “que va guardando la religiosidad a través de las manos de ellos” y que evoca, dice, “la imagen del jíbaro que dejaba la huella de la cuchilla en cada corte”.

Estuvo a punto de no someter la talla que le ganó el primer lugar

Nicole empezó a trabajar en madera por curiosidad en el taller de un primo suyo. Aunque dibujaba y le gustaban las manualidades fue en ese taller donde comenzó a relacionarse y a comprar maderas nobles, navajas y máquinas hasta que hace tres años y medio se certificó como talladora a través de Fomento y el ICP.

Este no es su primer premio, el año pasado ganó cinco premios en certámenes en Aguada, Aguadilla y Utuado, entre otros.

Para hacer sus tallas utiliza no solo la creatividad sino cuanta herramienta sea necesaria, incluso máquinas eléctricas. “Comienzo con gubias dando formación, lijado, tallado, uso todo, hasta las pinzas de sacarme las cejas para colocar algún detalle, lo importante es que crees una pieza única que tenga los detalles, lo más perfecto posible y que los atributos se vean bien marcados y bien dotados y madera de calidad”, explica sobre su proceso creativo.

En cuanto a la participación de talladoras y talladores jóvenes en el certamen de la Candelaria sostuvo que es muy importante.

“Uno ve ahora a la juventud enfocada con celulares y computadoras y esta cultura tan enriquecedora que tenemos y, sobre todo, la talla de santos, es importante que continuemos ese legado. Que no lo dejemos perder. Y a esos jovencitos que yo veo le doy ese consejo. Ahora mismo mis primitos se fugan de su casa para cortar madera y tallar conmigo y yo digo, quién sabe que de ahí saldrán otros talladores”, sostuvo minutos después de recoger su premio de manos de la gerente interina del Departamento de Arte y Cultura de Mayagüez, Frances Rodríguez y la directora del Archivo Histórico Municipal María Colom, en un acto celebrado en el Museo Casa Grande donde se expone por primera vez la colección municipal de tallas de la Candelaria.

Habiéndose comprometido en participar en las fiestas de la calle San Sebastián, Nicole pensó que no podría terminar a tiempo la talla que sometió a concurso y que le mereció el primer premio.

“Yo dije, papito Dios ayúdame, porque si no me consagro a él no hago ninguna pieza. Comencé en diciembre, me levantaba a las seis de la mañana y tallaba un poco y al otro día me levantaba a las tres de la mañana y no adelantaba, hasta que lo logré y pude entregarla”, explicó.

Hoy está “súper contenta, jamás pensé que iba a llevarme un primer lugar”.

Tallar santos ha convertido a una joven artesana “en una mejor persona” Según dijo la talla de santos le ha cambiado la vida. “Me ha tocado en mi vida y en mi profesión. Considero que, además de cada pieza mejorar mi talento, me ha convertido en una mejor persona con cada una que realizo. Mi vida ha sido tocada muy grandemente con la talla de santos”.

En la categoría primitiva o tradicional el premio es para…

Luis F. Rivera Figueroa ganó el primer lugar de la categoría primitiva o tradicional y recibió un premio en metálico de mil dólares. Su obra formará parte de la colección municipal. Juan Arturo Martínez Almanza ganó el segundo premio de 500 dólares y Lourdes Monserrate Aquino Ramos ganó el tercer lugar y un premio en metálico de 300 dólares.

En la categoría contemporánea el ganador fue Enrique Josué Velázquez Marrero quien obtuvo un permio en metálico de mil dólares y su obra también formará parte de la colección municipal.

El premio en la categoría especial que se concede a un tallador mayagüezano se declaró desierto. Este premio concede un premio en metálico de 200 dólares.

Las artesanas Isabel María Quiñones Martín, Nilda Rosa González González, Nayely Martínez Aquino, Altagracia Concepción Calderón Román y Ana M. Díaz González recibieron menciones honoríficas por la calidad de sus piezas y un permio en metálico de 100 dólares cada una.

Tallar santos ha convertido a una joven artesana “en una mejor persona” Yo quiero preservar la tradición de mi tía abuela

Delvin Valle de 25 años fue otro joven que participó en el certamen. No ganó pero la experiencia, dice, ha sido muy enriquecedora.

Viene de una familia de talladores en la que luego del fallecimiento de su tía abuela se perdió la tradición. Con un bachillerato en teoría del arte y artes plásticas hace un año decidió dedicarse a la talla de santos.

“Decidí continuar la tradición de mi tía abuela” y de su marido “quien murió una semana antes de certificarme como tallador”. “Llevo un año y cinco meses”, dijo en un aparte con mayaguezsabeamango.com.

Esta era su cuarta competencia. En Aguadilla ganó premio y en las otras tres no ganó. “Pero eso no es nada, es cuestión de participar y darme a conocer entre los talladores. Es bueno empezar desde ahora a tallar y mantener la tradición de la talla viva”.

Es necesario hacer talleres

Anquita sugirió que para estimular la incorporación de nuevos talladores se organicen talleres donde aprender el oficio y recordó que ese ha sido el norte del certamen mayagüezano de tallas de la Candelaria durante los pasados 22 años.

Ahora, la gestora cultural sugiere retomar los talleres y hacer un registro de artesanos que estén dispuestos a enseñar a nuevas generaciones de artistas. “Y que cada municipio pueda separar en su presupuesto recursos para dar los talleres. Son económicos y hay mucha gente que quisiera aprender a tallar”.

No a la eliminación del ICP

Ante el propuesto desmantelamiento del Instituto de Cultura Puertorriqueña, responsable de promover, conservar y preservar el patrimonio cultural de los puertorriqueños desde 1955 y su traspaso al Departamento de Desarrollo Económico y Comercio, Anguita sostiene que eliminar el ICP “atenta contra nuestra identidad y no se debe permitir”.

“La cultura no es un edificio que por su riqueza arquitectónica tiene gran importancia sino que es algo más. Me refiero a lo que guarda y protege. La cultura es cada cosa que representa nuestras raíces, esto no se pierde si los artesanos veteranos y probados se ponen a disposición para dar talleres para que los niños y jóvenes aprendan a tallar y valorar lo nuestro. Pero está en todos nosotros los puertorriqueños que nos unamos para defender lo nuestro”, subrayó.

La exposición de tallas de la Candelaria puede visitarse de lunes a viernes de ocho de la mañana a cuatro de la tarde en el Museo Casa Grande de Mayagüez los sábados puede visitar con cita previa.

La exposición podrá visitarse hasta el 15 de febrero 2025.